Desde su distanciamiento público y un conflicto legal que duró años, Antonio de la Rúa ha vuelto a compartir espacio con Shakira, esta vez en un plano estrictamente profesional. De la Rúa fue visto nuevamente dentro del equipo de trabajo de la gira Las mujeres ya no lloran World Tour, acreditado en los shows como parte del staff y formando parte del círculo logístico que acompaña a la colombiana en sus presentaciones.  

Su presencia fue especialmente notable en los conciertos en Buenos Aires donde también fue visto backstage junto a su familia, y luego en México, donde Shakira reactivó el vínculo con su antiguo entorno íntimo. Aunque esto reavivó rumores de una posible reconciliación sentimental, periodistas como Lorena Vásquez y Laura Fa aclararon que el vínculo entre ambos es por ahora exclusivamente laboral.  

Ese mismo nivel de emotividad se hizo palpable en su presentación en Tijuana, donde Shakira incluyó por primera vez en casi 20 años la balada “Día de enero”, compuesta para Antonio de la Rúa y nunca antes interpretada en vivo desde la gira Fijación Oral. Al dedicarla, dijo: “Esta canción es para esos amigos que están para siempre. No importa qué pase, están ahí.” Este momento fue interpretado por fans y medios como una señal del significado duradero que De la Rúa aún tiene en su historia personal.

Este reencuentro marca un punto de inflexión: una relación que concluyó con un litigio millonario parece haberse convertido nuevamente en una alianza profesional madura, donde el pasado inspira actuación artística y gestión estratégica, sin que por ahora haya señales de reavivamiento sentimental.